viernes, 10 de marzo de 2017

Harry Potter y el legado maldito

¡ATENCIÓN! Esta entrada va a contener spoilers, que serán avisados. La primera parte sólo será una contextualización y sinopsis del texto, mientras que la segunda será la que contendrá los spoilers. Al comienzo de esta segunda parte colocaré otro aviso.

En la universidad, unos compañeros y yo hicimos un trabajo sobre este libro. Como salió bien y quedamos muy contentos, he decidido coger ese trabajo y utilizar las conclusiones que sacamos para explicaros por qué este libro esconde mucho más de lo que parece en una primera y superficial lectura.

Harry Potter y el legado maldito no es, en sí, la octava historia de la saga original de J.K. Rowling. No te explican qué es lo que ha dado origen a este libro, pero sí que te dicen que "está basado en una historia de J.K. Rowling". ¿Qué quiere decir esto? ¿Rowling imaginó lo que sucedía en esta historia y dejó que John Tiffany y Jack Thorne la convirtieran en una obra de teatro? ¿O la historia está creada por estos dos últimos simplemente a partir de una idea imaginada por ellos mismos a partir de la saga original, pero contando con la aprobación de Rowling? Personalmente me decanto por la segunda opción. En el texto hay ciertos elementos que realmente no parecen creados por ella, sino que se asemejan más a lo que a un lector le hubiera gustado que pasara.
Para quien no lo sepa, Harry Potter y el legado maldito es un guión teatral escrito por John Tiffany y Jack Thorne (y basado en una historia de J.K. Rowling) que se publicó en el 2016. El título original es Harry Potter and the Cursed Child ("Harry Potter y el niño maldito"), pero en España, la traducción de Gemma Rovira publicada por Salamandra se tituló Harry Potter y el legado maldito, una elección casi más correcta que la original. Tiene 321 páginas, pero al ser una obra de teatro, la lectura se simplifica mucho.

La sinopsis del libro es la siguiente:
«Ser Harry Potter nunca ha sido tarea fácil, menos aún desde que se ha convertido en un ocupadísimo empleado del Ministerio de Magia, un hombre casado y padre de tres hijos.
Mientras Harry planta cara a un pasado que se resiste a quedar atrás, su hijo menor, Albus, ha de luchar contra el peso de una herencia familiar de la que él nunca ha querido saber nada. Cuando el destino conecte el pasado con el presente, padre e hijo deberán afrontar una verdad muy incómoda: a veces, la oscuridad surge de los lugares más insospechados».

Por tanto, el inicio de la historia se sitúa en el epílogo de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, es decir, 19 años después de la muerte de Lord Voldemort. Y trata, sobre todo, de los problemas que existen entre Albus y su padre, las diferencias aparentemente irreconciliables y las dificultades que tiene Albus al ser el hijo del héroe que libró al mundo de la tiranía de Lord Voldemort.
En una lectura superficial, lo único con lo que nos quedamos es con el argumento, argumento que todo el mundo ha considerado como "un poco flojo y extraño", pero lo más importante de este libro no está en lo que sucede, sino en por qué sucede, qué se esconde detrás de los actos de los personajes y, sobre todo, cómo se ha construido la historia.
Y hasta aquí puedo hablar sin caer en spoilers, por tanto...

¡ATENCIÓN! A continuación voy a utilizar la historia para explicar los puntos por los que es tan interesante. Por lo tanto, esta sección de la entrada sólo será útil para aquellos que hayan leído la historia. Si no has leído la historia pero te dan igual los spoilers porque no te interesa leerla, quizá no entiendas muchas cosas porque no me voy a tomar la molestia de explicar el argumento completo.
COMIENZAN LOS SPOILERS
Luego no me digáis que no he avisado...

Para comenzar esta parte, voy a utilizar las palabras de un amigo (y compañero de trabajo) para resumir la historia:
«Cabe recordar que Albus Severus Potter es el hijo del legendario Harry Potter, el gran héroe que libró al mundo mágico de la tiranía de Lord Voldemort. Y su hijo no se parece en nada a él. Esto genera un gran sentimiento de rechazo, porque el propio Albus, a pesar de los intentos de Harry, sólo ve en él al héroe, y no a la persona. Y cuando Albus descubre la forma de emprender una aventura con la que equipararse a Harry y a la vez enmendar uno de sus mayores 'fallos' (la muerte de Cedric Diggory), no se lo piensa dos veces y se lanza en una cruzada tan peligrosa como innecesaria».
Cruzada tan innecesaria como la historia de este libro, lo que no quiere decir que sea malo. Es más, después de analizar este texto me ha parecido que es tan bueno como incomprendido. Empiezo:

Estamos acostumbrados a una figura de un héroe que nunca ha querido serlo, que ha sido elegido para salvar el mundo, y que además procede (en la mayor parte de los casos) de un hogar desectructurado o abandonado y de unas condiciones muy humildes. En el caso de Albus, esto no es así. Albus procede de un hogar lleno de amor, y de una familia de bien, una familia importante: su padre es el gran Harry Potter, jefe del Departamento de Seguridad Mágica, su madre Ginny es una importante redactora deportiva del periódico mágico por excelencia, su tía Hermione es la Ministra de Magia, y su tío Ron es copropietario de una de las más míticas tiendas de artículos de broma que existen, "Sortilegios Weasley". ¿Quién no conoce a estas alturas los apellidos Potter, Weasley y Granger? Quizá ese es el problema de Albus. Es un niño que ha crecido siempre bajo la sombra de estos héroes, además de tener un evidente parecido físico con su padre, pero no parecerse en nada a él: al llegar a Hogwarts se convierte en el mejor amigo de Scorpius Malfoy y es seleccionado para Slytherin, es un desastre en quidditch y no es un gran estudiante, lo que provoca que sus compañeros le acosen y se metan con él. Algunos os preguntaréis si no era más lógico que ambos hubieran sido seleccionados para Gryffindor, pero en realidad lo que mueve a los dos es la ambición, mucho más evidente en Albus que en Scorpius. Albus es ambicioso por naturaleza, un líder, algo muy valorado en su casa, y además tiene la ambición de superar a su padre. Por otro lado, Scorpius lo único que ambiciona es una vida normal, tener amigos y ser aceptado. Por tanto, Albus sería el héroe que quiere ser héroe y, por tanto, fracasa en su intento de ser héroe: todo lo que hace acaba empeorando la situación, pero es incapaz de verlo. Scorpius, en cambio, es el héroe que no quiere serlo, pero que se ve arrastrado a serlo al tener que arreglar los problemas que causa Albus.
Lo que quiero explicar con esto es que, gracias a este texto, estamos asistiendo a una revisión de la figura del héroe, una revisión que te invita a reflexionar sobre este tema y a comprender mejor la naturaleza del personaje heroico.

Por otro lado, tenemos que prestar especial atención a la construcción del texto. Si no estáis habituados al teatro, probablemente os habéis sentido tremendamente incómodos ante el texto. Pero esta estructura teatral es necesaria para la transmisión de la historia. El texto está compuesto por escenas muy breves y muy concisas, situadas en un único espacio cada una, lo que tiene una especial importancia a la hora de ver representada la historia. Los espacios que más importancia tienen en la historia son la habitación de Albus, que simboliza el problema que existe entre padre e hijo, la base de la personalidad de Albus, y los sueños de Harry, representados en lugar de narrados, que simbolizan el miedo de Harry a perder a su hijo, que es en lo que se basa el personaje de Harry en esta historia.
Además de este uso tan especial de los espacios, los autores utilizan unas acotaciones que dan más información de la necesaria para que la historia sea representada. Esto puede deberse tanto al interés de los autores en contentar al lector como a un interés más profundo en reinventar el teatro. Estas acotaciones, que quizá hayáis pasado por alto, buscan una conexión entre el lector y los personajes, mostrando su mundo interior y sus pensamientos. Además, hay esquemas de acotaciones que se repiten a lo largo de la historia, como la aparición de Voldemort y, la que más me interesa, a los viajes en el tiempo, en las que el propio tiempo "se detiene, se da la vuelta, piensa un instante y empieza a girar hacia atrás". El verbo pensar me lleva a lo que más me ha llamado la atención de este texto: el Tiempo.

En conclusión, a donde quería llegar es a este especial uso del Tiempo en toda la obra. El argumento de la historia gira en torno al Tiempo, convirtiéndolo en un elemento indispensable, pero también en algo más. Por tanto, tenemos:

  • El Tiempo como idea: La historia gira en torno al Tiempo, si este elemento no existiera, no habría historia. El Tiempo es un recurso muy utilizado en la literatura fantástica, pero quizá no sea tan fundamental en otras historias como en esta.
  • El Tiempo como espacio: Los personajes se desplazan por el Tiempo como quien pasea por la calle, o por el salón de su casa. El lector no viaja hacia atrás y hacia delante en el tiempo simplemente por referencias en el texto, sino que acompaña a los personajes en estos viajes. Este Tiempo interpretado como espacio llama mucho la atención al simbolizar los remordimientos de Harry por la muerte de todos aquellos que murieron por su culpa o causa.
  • El Tiempo como personaje: Aquí me remito a lo que marqué en la acotación de antes: piensa. Este verbo le aporta al Tiempo, en primer lugar, la capacidad de ser un elemento animado en lugar de una idea abstracta, y en segundo lugar, la capacidad de raciocinio, lo que permite una personificación del Tiempo. Este Tiempo como personaje sería el protagonista indiscutible de la obra, un personaje que arrastraría a todos los demás (aunque no sean conscientes de ello) y que, si yo fuera la encargada de poner en escena la obra, haría que fuera interpretado por un actor.

Por último, tengo que hacer alusión a la redención de Draco Malfoy, ya que este texto nos puede ayudar a perdonarlo y entenderlo, y a la de Severus Snape (no, no estaba redimido del todo) al volver a sacrificarse por la causa que defendía, no sólo muriendo para ayudar a Scorpius, sino eligiendo una realidad libre en la que él no existe en lugar de una en la que sigue vivo. Todo por el bien común, Snape. Siempre.

PD1: No he mencionado a Delphi porque me parece un personaje estúpido, innecesario y muy cogido por los pelos. Bueno, innecesario no, pero podría haber estado MUCHO mejor construido.

PD2: Debo agradecer a @TheRobotSoul y al otro compañero su análisis del texto en el trabajo mencionado al principio, porque sin ellos no hubiera podido hacer esta entrada.

PD3: Si queréis leer el trabajo completo podéis hacérmelo saber por los comentarios y podríamos llegar a alguna solución, ya que es muy largo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario